< Previousese trabajo dos logros. Uno fue estratégico, para él y para todos los que hemos intentado seguirle. Se requería que un cubano publicara un artículo serio; era preferible que ese artículo, pilar que sería de todos los estudios cubanos pos- teriores, fuera aburrido. El aburrimiento intencionado fue táctica imprescin- dible para obtener la credibilidad profesional. Su segundo logro fue académico. Mesa-Lago nos enseñó a leer, usar y apren- der a evaluar las estadísticas oficiales cubanas. Su artículo compiló e hizo pública información para muchos desconocida, pero más importante y duradera fue su lección metodológica. Debe sorprendernos que en 1969 fue una innovación en los estudios sobre Cuba todo lo que menciono —aunque parezca evidente, simple y elemental— en la lista siguiente: 1]Es imprescindible poseer datos. 2] Sí es posible usar la información producida por organismos del gobier- no de Cuba. 3]Es menester hacer un esfuerzo adicional y consciente para comprobar la validez de esos datos. 4] Se requiere una perspectiva histórica, tomando igualmente en serio las estadísticas prerrevolucionarias, para usar y analizar las estadísticas que cubren los años posteriores a 1958. 5]Se deben construir series estadísticas, en vez de afianzarse simplemente a la estadística puntual que más nos guste. 6]Es obligatorio buscar datos que nos falten para llenar huecos e impedir la interrupción de las series estadísticas. 7]Un investigador se auto-impone la necesidad de resolver inconsistencias en la información estadística, y proponer una solución. 8]En última instancia, cuando falten datos es preciso construir estimados estadísticos, sujetos a tres reglas: a]Premisas transparentes. b] Reglas explícitas. c]Se procede sobre la base de los datos actualmente disponibles y confiables. Establecidas sus credenciales académicas, Mesa-Lago reanuda su labor investigadora sobre Cuba con un público universitario mucho más atento e intelectualmente diverso. Su primer gran aporte analítico fue el proyecto de investigación sobre la economía cubana que resulta en sus cuatro capítulos en el libro Revolutionary Change in Cuba 2 .En el primero, describe la organización del sistema de planeación en Cuba, expone su evolución a partir de 1959, y explica y analiza los diversos sobresaltos, experimentos y modificaciones que sufren los esquemas formales, subrayando la importancia de decisiones infor- males y ad hoc. Jorge I. Domínguez 8 encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 2 Mesa-Lago, Carmelo (comp.); Revolutionary Change in Cuba; University of Pittsburgh Press, Pitts- burgh, 1971. Los capítulos son «Central Planning», con Luc Zephirin; «Labor Organization and Wages», con Hernández, Roberto E.; «Economic Policies and Growth» y «Present and Future of the Revolution».9 El segundo de estos capítulos amplía y desarrolla la labor que Mesa-Lago ya había venido desarrollando 3 sobre empleo, desempleo y temas cubanos afines, y que seguirán siendo elementos fundamentales en su producción académica futura 4 . Es quizás éste el tema por el que más se le conoce en su investigación académica, en parte porque también se vincula con su magis- tral investigación y publicación sobre la seguridad social en toda América Latina, incluyendo pero nunca limitándose al caso cubano 5 . Mesa-Lago estu- dia el papel, la estructura y el desempeño de los sindicatos, en particular de la Central de Trabajadores de Cuba ( ctc ). Observa el deterioro de los siste- mas de contratos colectivos y llama la atención sobre el que los nuevos mecanismos de resolución de conflictos laborales carecen de real efectivi- dad. Pondera el sistema de cuotas y escala salarial como posibles instrumen- tos para estimular la cantidad y eficiencia del esfuerzo laboral, anotando cómo se debilitan estos incentivos con la acelerada desmonetización de la economía hacia fines de los 60. Analiza las campañas de emulación socialis- ta y los experimentos para promover la participación en la toma de decisio- nes en fábricas y granjas, concluyendo que estos métodos se aplicaban poco, de manera formalista, y que prevalecían al terminar esa década los instru- mentos de compulsión. El tercer proyecto, plasmado en otro capítulo, estudia las políticas econó- micas de Cuba en la primera década posterior a la victoria revolucionaria, y observa sus resultados. Siempre consciente de la comparación histórica, en este capítulo Mesa-Lago inserta la experiencia cubana de los 60 en su previo contexto del siglo xx. Examina la tortuosa evolución de la política económi- ca de estos años, la brutal contracción del consumo para financiar la inver- sión y cubrir los costos del ineficiente manejo de la política económica, el retorno triunfalista al desarrollo del sector azucarero durante el segundo quinquenio de la década, y las tristes consecuencias de estas variadas políti- cas y su exaltada aplicación. Subraya Mesa-Lago que el resultado final de esa primera década de políticas económicas fue precisamente lo opuesto a los propósitos que se había fijado el gobierno: Distorsiona la economía, impide el desarrollo de una industrialización eficiente, desestimula al obrero y genera Aportes a los estudios sobre Cuba... encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 3 A partir de 1962, Mesa-Lago fue miembro del Grupo Cubano de Investigaciones Económicas, con sede en la Universidad de Miami. La obra principal de este grupo fue Un estudio sobre Cuba (University of Miami Press, Coral Gables, FL., 1963), que incluía, entre otros, capítulos sobre temas laborales y seguridad social. El grupo también publicó Labor Conditions in Communist Cuba (University of Miami Press, Coral Gables, FL., 1963). 4 Entre muchos posibles ejemplos, véanse dos trabajos anteriores de Mesa-Lago, Carmelo; The Labor Sector and Socialist Distribution in Cuba(Praeger, New York, 1968) y «Economic Significance of Unpaid Labor in Socialist Cuba», en: Industrial and Labor Relations Review , 22:3, abril, 1969, y otro largo y posterior, «The Labor Force, Employment, Unemployment, and Underemployment in Cuba, 1899-1970», en: Sage Professional Papers in International Studies1:9, 1972. 5 Para un ejemplo reciente, véase Mesa-Lago, Carmelo; «La globalización y la seguridad social en Cuba: Diagnóstico y necesidad de reformas», en: de Miranda Parrondo, Mauricio (comp.); Cuba: Reestructuración Económica y Globalización; Centro Editorial Javeriano, Bogotá, 2003.una dramática caída de la calidad y cantidad del trabajo, profundiza la dependencia internacional sobre un solo país y un solo producto de exporta- ción, e impone costos exorbitantes a la población. En términos per cápita, la economía no crece durante esa década. El último de sus capítulos en este libro amplía su temática. Le corresponde resumir los temas de un gran —en calidad y extensión— libro, incluyendo política interna, relaciones internacionales, educación, religión, teatro, litera- tura y, por supuesto, los suyos sobre la economía. Demuestra sus dotes de inte- lectual, no solamente los de economista. Inserta en ese capítulo también a Cuba explícitamente en el marco de una comparación internacional con otros países socialistas. Este capítulo final da a entrever dos tareas adicionales que Mesa-Lago aco- meterá en el futuro. Tratará en su influyente libro sobre Cuba en los 70 temas muy diversos, cubriendo la experiencia cubana en política interna, relaciones internacionales, sociedad y economía 6 . Y el valioso esfuerzo de comparación sistemática reaparecerá de otra forma, y con superior profundización, treinta años después, en su excelente comparación de las trayectorias económicas de tres modelos económicos marcadamente distintos, es decir, los implantados en Chile, Cuba, y Costa Rica durante el último tercio del siglo xx 7 . Mesa-Lago contribuirá también, a partir de 1990, a la evaluación de los cambios de política económica en Cuba mediante varias publicaciones, entre las que sobresalen sus estudios con relación al impacto directo sobre la econo- mía cubana de la desaparición de la Unión Soviética y de los demás regíme- nes comunistas en Europa, y su evaluación de las políticas de reforma econó- mica parcial que caracterizaron el desempeño del gobierno cubano durante el primer quinquenio de los 90 8 . Aparte de sus extraordinarios aportes al análisis de temas y momentos específicos de la economía cubana, Mesa-Lago también produce muy útiles síntesis de su investigación y reflexión académica, construidas sobre la base de las investigaciones y publicaciones ya citadas, pero ampliadas, actualizadas y ubicadas en un contexto histórico. Estos imprescindibles textos aparecen en español, aunque el primero de éstos también se publica en inglés 9 . Jorge I. Domínguez 10 encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 6 Mesa-Lago, Carmelo; Cuba in the 1970s ; University of New Mexico Press, Albuquerque, NM, 1974. 7 Mesa-Lago, Carmelo; Market, Socialist, and Mixed Economies: Comparative Policy and Performance: Chile, Cuba, and Costa Rica ; Johns Hopkins University Press, Baltimore, 2000. 8 Véanse sus capítulos «The Economic Effects of the Soviet-Eastern European Crisis on Cuba» y «Cuba’s Economic Policies and Alternatives to Confront the Crisis», en: Mesa-Lago, Carmelo (comp.); Cuba After the Cold War; University of Pittsburgh, Pittsburgh, 1993. También léase su Are Economic Reforms Propelling Cuba to the Market? ; University of Miami North-South Center, Miami, 1994. 9 Mesa-Lago, Carmelo; The Economy of Socialist Cuba: A Two-Decade Appraisal; University of New Mexi- co Press, Albuquerque, NM, 1981; La economía de Cuba socialista: una evaluación de dos décadas; Edito- rial Playor, Madrid, 1983; Breve historia económica de la Cuba socialista: Políticas, resultados, y perspectivas; Alianza Editorial, Madrid, 1994, y Economía y bienestar social en Cuba a comienzos del siglo XXI; Editorial Colibrí, Madrid, 2003.11 aportes como creador y promotor institucional Mesa-Lago ha sido no solamente un excelente académico sino también un constructor y promotor de instituciones. Su aporte en estos términos fue deci- sivo en la fundación de la revista Cuban Studies/Estudios Cubanos, la organiza- ción y difusión de la «pequeña industria» de estudios sobre Cuba, y el creci- miento del Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Pittsburgh. Y fue importante en el desarrollo de lasa, así como en el impulso a la comunicación internacional entre latinoamericanistas. Cuban Studies y libros afines En diciembre de 1970, Mesa-Lago funda lo que se llamó en su inicio el Cuban Studies Newsletter, con vocación exclusivamente bibliográfica, en parte porque un aspecto de su origen fue en una reunión internacional que se convocó en abril de 1970 en la Biblioteca del Congreso de ee.uu.para discu- tir los retos enfrentados en la obtención de información y material bibliográ- fico pertinente a Cuba. En 1971 se empiezan a publicar reseñas y, en 1972, aparece un artículo bibliográfico sobre la literatura cubana de los 60 escrito por Lourdes Casal. Incluso en sus primicias, ya la revista logró proveer a sus lectores de nuevas herramientas para los estudios sobre Cuba. En parte, qui- zás, este enfoque bibliográfico pareció deseable en el instante de la funda- ción porque no provocaría el lanzamiento de dardos políticos. Una vez más Mesa-Lago convertía en recurso el aburrimiento como táctica útil para una iniciativa novedosa. En julio de 1975, la publicación se transforma en revista semestral, con artículos de fondo, aparte de las reseñas y bibliografía de siempre. Mesa-Lago trabajaría como editor de Cuban Studies/Estudios Cubanoshasta 1990. Como editor, tuvo vocación de «todólogo» —todo lo pertinente a los estudios sobre Cuba, sujeto a las normas de una revista académica, recibiría acogida en sus páginas—. En distintos momentos, la revista publicó números especiales para agrupar y profundizar sobre temas concretos. La mera lista de temas publica- dos señala su muy amplia gama: 1]Articulación y diseño administrativo del régimen político. 2] Procesos políticos. 3]Líder, partido comunista, pueblo, revolución, ideología e instituciones. 4]Historia —entendiendo el pasado como realidad pero también como símbolo. 5] Crítica literaria. 6]Género. 7]Relaciones raciales —historia, literatura, música, sociedad. 8]Religiosidad e iglesias y comunidades de fe. 9] Diáspora —continuidad y cambios. 10]Economía —macroeconomía, sectores económicos, incentivos. 11]Demografía. 12]Educación. 13] Relaciones internacionales y política exterior. Aportes a los estudios sobre Cuba... encuentro homenaje a carmelo mesa-lagoMás importante fue que la revista era la única publicación académica sobre Cuba con carácter plural, exenta de un control ideológico o partidista que a priori negara la publicación de autores con criterios ajenos a los del edi- tor. Es más, en la evolución del contenido de la revista una innovación útil fue la inclusión de controversias y debates. Mencionaré sólo algunos de éstos para ejemplificar su diversidad. Los artículos que suscitan el primer debate se publican en julio de 1979. Max Azicri critica la obra de Edward González, Carmelo Mesa-Lago y Jorge Domínguez, por subestimar el entonces llamado por algunos «proceso de ins- titucionalización» en Cuba. Azicri consideraba que estos tres autores, entre otros defectos, exageraban la importancia de Fidel Castro y de la Unión Sovié- tica en el proceso político cubano 10 . Al año siguiente, William LeoGrande y Edward González debaten las moti- vaciones del gobierno de Cuba en sus guerras africanas. Para LeoGrande, las motivaciones ideológicas poseían particular importancia; para González, los intereses de Cuba eran más concretos e incluían un intento de contrarrestar los desequilibrios en la relación entre Cuba y la urss 11 . Un tercer debate fue sobre los costos y beneficios económicos del comportamiento internacional de Cuba, particularmente en África. Para Sergio Roca, los costos de la partici- pación de Cuba en guerras y otras misiones internacionalistas en África exce- dían los beneficios, y estos últimos eran principalmente políticos. Para Susan Eckstein, los beneficios materiales primaban. Según ella, Cuba iba en búsque- da de nuevos mercados y suministros en África 12 . Y, por supuesto, hubo deba- tes sobre el peso relativo de la urssen la toma de decisiones cubanas sobre política exterior. En las páginas de esta revista, nadie propuso que Cuba haya sido simplemente un muñequito de Moscú, pero Jiri Valenta subrayaba más el peso relativo soviético sobre las decisiones cubanas mientras que Cole Blasier lo enfatizaba menos que Valenta 13 . Los debates más agudos fueron, sin embargo, explícitamente sobre temas económicos. Éstos se desarrollaron en las páginas de distintas publicaciones, entre ellas, aunque no principalmente, Cuban Studies 14 .El principal debate Jorge I. Domínguez 12 encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 10 Azicri, Max; «The Institutionalization of the Cuban Revolution: A Review of the Literatura», en: Cuban Studies, 9:2, julio, 1979, y respuestas en ese mismo número de Jorge Domínguez y Edward González. 11 LeoGrande,William; «Cuban-Soviet Relations and Cuban Policy in Africa», y González, Edward; «Comment: Operational Goals of Cuban Policy in Africa», ambos en Cuban Studies , 10:1, enero, 1980. 12 Roca, Sergio; «Economic Aspects of Cuban Involvement in Africa» y Eckstein, Susan; «Com- ment: The Global Political Economy and Cuba’s African Involvement», ambos en Cuban Studies, 10:2, julio, 1980. 13 Blasier, Cole; «Comment: The Consequences of Military Initiatives», en: Cuban Studies , 10:1, enero, 1980, y Valenta, Jiri; «Comment: The Soviet-Cuban Alliance in Africa and Future Prospects in the Third World», en: Cuban Studies, 10:2, julio, 1980. 14 El libro que incluye y resume las más diversas críticas sobre cuestiones políticas, económicas y sociales fue compilado por Zimbalist, Andrew: Cuban Political Economy: Controversias in Cubanology; Westview Press, Boulder, Colorado, 1988.13 enfocaba los diversos estimados de las cuentas nacionales de Cuba y, en parti- cular, los estimados del crecimiento económico real 15 . Otro aspecto de este debate se produjo con relación a la relativa eficiencia del uso de diversos recursos por parte de las granjas estatales y el sector privado de la agricultura. Nancy Forster hizo hincapié en la superior productividad en el uso de la tie- rra del sector privado, mientras que David Kaimowitz afirmó la superior pro- ductividad en el uso de la mano de obra de las granjas 16 . Una parte del debate económico giró en torno a la interpretación de los efectos de la intervención de Fidel Castro en las decisiones económicas, con- traviniendo el plan central. Para Roca, esa micro-intromisión, basada en capri- chos personales, generaba caos. Para Zimbalist, ese comportamiento era útil para resolver problemas concretos, confrontar las ineficiencias inherentes en la burocracia administrativa, establecer prioridades y permitir la única contra- loría posible en esas condiciones 17 . Finalmente, hubo un debate sobre el proceso de «rectificación,» es decir, los cambios de política económica y social que ocurren en 1985-86. Critican- do una publicación de Mesa-Lago, Susan Eckstein argumentaba que el gobier- no de Cuba tenía buenas razones económicas para aplicar las nuevas medidas, en particular una crisis fiscal. Un impacto de la creación de un sector privado campesino y de algunos servicios a comienzos de los 80, según ella, fue la corrupción y desviación de recursos del sector público al privado. En vez de una motivación ideológica, afirmaba ella, en realidad se trataba de una mejor disciplina laboral. Mesa-Lago contestó que los desequilibrios económicos pre- vios a la llamada rectificación se exageraban, y que muchos de los síntomas adversos no fueron causa sino consecuencia de la rectificación. El gobierno cubano poseía, además, otras alternativas para hacer frente a la crisis fiscal 18 . El debate con relación a los temas económicos se complicó porque a comienzos de los 80 las autoridades cubanas lo politizaron, enfilando sus ata- ques principalmente contra Mesa-Lago. El organizador de la posición oficial Aportes a los estudios sobre Cuba... encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 15 Un ejemplo de aspectos del debate económico que aparecieron en Cuban Studiesfue el inter- cambio entre Alan Abouchar («Measuring Cuba’s Economic Growth») y Jorge Pérez-López («A Reply to Abouchar»), ambos en Cuban Studies, 20, 1990. 16 Forster, Nancy; «Cuban Agricultural Productivity: A Comparison of State and Private Farm Sec- tors», en: Cuban Studies , 11:2, julio, 1981 y 12:1, enero, 1982; Kaimowitz, David; «Commentary: Productivity or Efficiency in Cuban Agriculture: The Question of Factor Intensity», y Forster, Nancy; «Reply to David Kaimowitz», ambos en Cuban Studies, 12:2 , julio, 1982. 17 Roca, Sergio; «State Enterprises in Cuba Under the New System of Planning and Management ( sdpe )», en: Cuban Studies , 16, 1986; Zimbalist, Andrew; «Analyzing Cuban Planning: A Response to Roca», y Roca, Sergio; «Planners in Wonderland: A Reply to Zimbalist», ambos en Cuban Stu- dies, 17, 1988; Zimbalist, Andrew; «Cuban Planning: A Rejoinder to Roca», y Roca, Sergio; «Cuban Planning: Rebuttal to Zimbalist», ambos en Cuban Studies , 18, 1988. 18 Eckstein, Susan; «The Rectification of Errors or the Errors of the Rectification Process in Cuba», y Mesa-Lago, Carmelo; «On Rectifying the Errors of a Courteous Dissenter», ambos en Cuban Studies, 20, 1990; Eckstein, Susan; «More on the Cuban Rectification Process: Whose Errors?», y Mesa-Lago, Carmelo; «Rectification Round Two: An Answer to Eckstein’s Rebuttal», ambos en Cuban Studies, 21, 1991.cubana fue el entonces vicedirector del Centro de Investigaciones sobre la Economía Mundial, José Luis Rodríguez, quien años después sería el princi- pal impulsor de las reformas económicas de principios de los 90. Sin embar- go, una iniciativa de Mesa-Lago —la publicación en Cuban Studies de uno de los artículos de Rodríguez criticando la llamada cubanología— contribuyó a que esta tormenta académica también llegara a su fin 19 . Sin intentar resolver en este breve ensayo los muy variados aspectos de estos acalorados debates con relación a la economía cubana, se pueden, sin embargo, constatar tres simples reflexiones. Un primer debate se resolvió. En los 70, Mesa-Lago fue muy criticado por referirse a la «sovietización» de distin- tos aspectos de la experiencia cubana. Ya en los 90 el Partido Comunista de Cuba oficialmente reconocía que en esa década se copió el modelo soviético excesiva y mecánicamente. La apreciación de Mesa-Lago resultó haber sido pertinente. Quizás nunca tendremos información confiable del subsidio sovié- tico a Cuba —un segundo debate—, pero la descomunal caída de la econo- mía cubana a comienzos de los 90 sugiere que tuvieron más razón quienes, como Mesa-Lago, consideraban que el monto del subsidio era muy alto. Final- mente, la economía cubana dejó de crecer en 1985, a pesar de una década y media anterior de un buen ritmo de crecimiento económico. La recupera- ción del descalabro de comienzos de los 90 ha sido gradual, insuficiente y llena de nuevos problemas. Probablemente las agudas y bien fundamentadas críticas de Mesa-Lago sobre la rectificación y, de manera más general, el creci- miento económico de Cuba, también fueron acertadas. Cuban Studiesfue, durante sus veinte años bajo la dirección de Mesa-Lago, un vehículo esencial para la publicación de artículos académicos, reseñas y bibliografía, y para debatir civilizadamente temas de importancia para Cuba y su estudio. La gama de temas fue amplia, y diversa la pluralidad de criterios. Las puertas de la revista estuvieron abiertas. Mesa-Lago fue generoso en el tiempo que le dedicaba al mejoramiento editorial de cada artículo que publi- caba. La revista presentó un abanico de opciones de análisis académico frente al dogmatismo de unos y la falta de curiosidad intelectual de otros. Mesa-Lago no se limitó a promover los estudios sobre Cuba en las páginas de esta revista. Su labor editorial como compilador de libros fue notablemen- te productiva y abierta también a diversas corrientes. Ya se citaron Revolutio- nary Change in Cubay Cuba After the Cold War. Habría que añadir también com- pilaciones de capítulos de diversos autores sobre temas distantes del resto de la obra de Mesa-Lago, tales como el papel de Cuba en el ámbito mundial, y en particular sus actividades en África 20 . Además, el interés de Mesa-Lago sobre Jorge I. Domínguez 14 encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 19 Véase Rodríguez, José Luis; «The So-Called Cubanology and Cuban Economic Development», y Mesa-Lago, Carmelo; «On the Objectives and Objectivity of Cubanology: A Response to a Critic from Cuba», ambos en Cuban Studies, 16, 1986. 20 Blasier, Cole y Mesa-Lago, Carmelo (comps.); Cuba in the World; University of Pittsburgh Press, Pitts- burgh, 1979; Mesa-Lago, Carmelo y Belkin, June (comps.); Cuba in Africa; Center for Latin American Studies, University Center for International Studies, University of Pittsburgh, Pittsburgh, 1982.15 la comparación del diseño y los resultados de diversos regímenes socialistas, culminó en la obra colectiva, encabezada por Carl Beck y por él, sobre múlti- ples aspectos políticos y económicos de los países socialistas 21 . Center for Latin American Studies-Pittsburgh y LASA Tanto Cuban Studiescomo los libros producidos por grupos de autores nos llevan a otro hito en la trayectoria de Mesa-Lago como promotor de institucio- nes —su largo desempeño como director del Centro de Estudios sobre Améri- ca Latina de la Universidad de Pittsburgh—. El Centro fue, por supuesto, sede, convocador, provocador y movilizador de recursos para las conferencias que desembocaron en compilaciones de capítulos o números especiales de Cuban Studies. Pero bajo la dirección de Mesa-Lago, el Centro tuvo una rica y activa vida propia como soporte de los estudios sobre América Latina, mucho más allá de los estudios sobre Cuba. Trabajando con equipos conformados por sus estudiantes, por ejemplo, Mesa-Lago se convierte en un gran experto sobre los sistemas de seguridad social de toda América Latina. Algunos de los rasgos importantes del Centro coinciden con elementos ya cita- dos de otros aspectos de la actividad de Mesa-Lago. Entre otros, se encuentran: 1]Hincapié en los estudios multi e interdisciplinarios. 2]Apertura a diversos temas, métodos de trabajo y marcos teóricos. 3] Bienvenida profesional y cariño humano para los muchos estudiantes latinoamericanos que buscaron cobijo y apoyo en ese Centro. 4]Dinamismo y crecimiento, año tras año. 5]Desarrollo de la excelente colección latinoamericana en la biblioteca, incluyendo el crecimiento de la colección sobre Cuba. 6]Auge y control del presupuesto, con empeño y tesón. El Centro en Pittsburgh obtiene el reconocimiento y financiamiento del gobierno federal de ee.uu.como recurso nacional («Title VI Center»), y de varias fundaciones privadas, entre otras el Carnegie Corporation of New York, el Howard Heinz Endowment y la Fundación Tinker. Recuerdo una conversa- ción con Martha Muse, presidentede la Fundación Tinker por muchos años, quien expresaba asombro sobre la eficaz tacañería de Carmelo, exprimiéndo- le el jugo hasta al último centavo de los donativos de esa Fundación. Mesa-Lago fue también el primer presidente de lasade origen latinoame- ricano. Toma posesión como vicepresidente de lasaen 1979 y como su presi- dente en 1980. En abril de 1979 funge, además, como encargado de la organi- zación local de lasa para la celebración de su octavo congreso internacional, que ocurre en Pittsburgh. Entre los múltiples aportes de Carmelo y de su esposa Elena fue la insistencia en que lasaorganizara un «Gran Baile», tradi- ción que persiste desde entonces, en la cual la pareja Mesa-Lago demostró su origen caribeño. Fueron ellos quienes contrataron, de New York, a Machito y Aportes a los estudios sobre Cuba... encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 21 Mesa-Lago, Carmelo y Beck, Carl; Comparative Socialist Systems: Essays on Politics and Economics; University of Pittsburgh Press, Pittsburgh, 1975.su orquesta 22 . Fue éste, además, el segundo congreso de lasa con la participa- ción de investigadores que vinieron al evento expresamente de Cuba, entre otros Manuel Moreno Fraginals y Miguel Barnet. Ser presidente de lasanunca ha sido fácil. En el momento que le corres- ponde serlo a Mesa-Lago, la organización era marcadamente desordenada y caótica, con nociones arcaicas de qué implica tener un presupuesto y, al mismo tiempo, obsesionada por batallas ideológicas que dificultaban su fun- cionamiento interno y la representación de los intereses de sus miembros en Washington. Mesa-Lago se comportó, como era su costumbre, con gran aper- tura intelectual y personal, trabajando minuciosamente para fortalecer a esta endeble organización. Le correspondió a Mesa-Lago durante su vicepresidencia y presidencia lidiar con decisiones particularmente importantes en la historia de la organi- zación. El consejo ejecutivo de lasaaprobó el establecimiento de una oficina en Washington para representar mejor los intereses de la membresía. Aceptó la oferta de University of New Mexico-Albuquerque de convertirse en la nueva sede del Latin American Research Review, reemplazando a University of North Carolina-Chapel Hill, decisión trascendental ya que sería la sede de la princi- pal revista de estudios latinoamericanos por dos décadas. Igualmente, decidió que la sede del secretariado de lasase trasladara de University of Illinois- Urbana a University of Texas-Austin. Durante su presidencia, además, Mesa- Lago defendió los intereses colectivos de nuestra profesión, en particular con relación a la política del gobierno federal al otorgar fondos bajo el capítulo seis de la ley de educación superior 23 . Crece la membresía durante sus años como ejecutivo de lasa . Mesa-Lago tuvo la idea de que los estudios sobre América Latina mejorarían si se lograba un mejor intercambio internacional entre investigadores en distintas partes del mundo. Como ejecutivo de lasa, Mesa-Lago se autoimpu- so la obligación de facilitar esos intercambios de una manera práctica, infor- mando sobre lo que se hacía para estudiar a América Latina en distintos paí- ses del mundo. Con fondos de la Fundación Tinker y el apoyo del equipo del Centro de Estudios Latinoamericanos en Pittsburgh, Mesa-Lago investiga los principales programas de estudios sobre América Latina y publica un primer reporte sobre tales estudios en Europa. Ese libro de 190 páginas presenta información sobre 13 países europeos, tres de ellos bajo regímenes comunistas. País por país, informa sobre las principales universidades, centros e institutos: Cuáles son sus programas, cómo se financian, quiénes son sus profesores, qué publican, cuál es el estado de las bibliotecas, cómo involucran a estudiantes en cursos y programas, y qué oportunidades hay de intercambios internacionales. El libro presenta un ensayo de Mesa-Lago comparando y analizando, mediante Jorge I. Domínguez 16 encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 22 Latin American Studies Association; Eighth National Meeting, Program ; Pittsburgh, 5-7 abril, 1979. 23 Véanse los siguientes números de Latin American Studies Association, Newsletter, 10:3, septiem- bre, 1979, 18-19; 11:1, marzo, 1980; 10-13; 11:3, septiembre, 1980, 9, y 11:4, diciembre, 1980, 11.17 estadísticas, observación, y entrevistas, la capacidad, actividad y calidad de estos centros europeos 24 . Cuatro años después, publica un libro de propósito, organización y tema similar, que investiga la presencia de la latinoamericanís- tica en China, India y Japón 25 . conclusión La obra de Carmelo Mesa-Lago ha sido excepcional. Es un economista que ade- más posee amplia curiosidad intelectual, un académico polifacético, productivo y exitoso, que ha sabido sana y eficazmente construir y desarrollar instituciones que promueven los intereses que muchos compartimos con él. Promovió el cre- cimiento de los estudios profesionales sobre Cuba, ayudando a jóvenes investi- gadores en los momentos iniciales de sus carreras —el caso mío— y se caracteri- zó por la apertura a ideas, argumentos y datos con espíritu pluralista. Facilitó y apoyó la participación y el reconocimiento de la buena labor realizada por investigadores cubanos, estén donde estén, física, ideológica o políticamente. Meticuloso en el manejo del detalle académico, obró con métodos rigurosos, pero sobre todo con gran y amplia visión, talento y generosidad personal. Aportes a los estudios sobre Cuba... encuentro homenaje a carmelo mesa-lago 24 Mesa-Lago, Carmelo; Latin American Studies in Europe, Latin American Monograph & Document Series; Center for Latin American Studies, University Center for International Studies, University of Pittsburgh, Pittsburgh, 1979. 25 Mesa-Lago, Carmelo with Kregar, Shirley; Latin American Studies in Asia; Latin American Mono- graph & Document Series, Center for Latin American Studies, University Center for Internatio- nal Studies, University of Pittsburgh, Pittsburgh, 1983. Conocimiento: Objeto-Análisis-Síntesis, Óleo sobre fotomontaje, 1982.Next >