Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance '100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo' (FOTO Gabriel Estrada Reyes)
Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance '100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo' (FOTO Gabriel Estrada Reyes)

Tras participar en la performance 100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo, parte de un programa comisariado por Osikán – Vivero de creación, y acción fundacional de su proyecto El Marabuzal, escribí estas palabras (como quien atraviesa, titubeante, un arbusto espinoso con inflorescencia en espiga colgante, como quien metaboliza la colaboración en la incertidumbre de su producción).

Comparto estas palabras que adjunté en un correo colectivo a Paloma Calle, José Ramón Hernández y Mercedes Ruíz el pasado 31 de marzo, obviamente, no las volví a releer hasta hoy, domingo, 2 de abril de 2023, a las 2 de la tarde en La Habana.

El registro textual de las artes vivas pasa por el escarpelo de ese “no sé qué”, frecuencia que aquí relato como una confesión nunca reticente, pero sí primaria, ya acostumbrada a lidiar con esa imposible recuperación total de la experiencia. Honestamente, soy adicta a repensar estos gestos cuando me implico en ellos, a fracasar o a divagar sobre lo que se nos escapa y aún distante o ausente nos interpela, adicta a eso que intentamos nombrar, mientras nuestras prácticas atraviesan el pantano de la indefensión o la soledad.

Una performance de cuatro horas en las que un bombo, una mano, un número, la enunciación de un acto, determinaban el próximo paso, el próximo hacer. Para mí, significó atravesar el riesgo que habita en los detalles, la tremenda sorpresa de lo diminuto, lo leve o pasajero. De manera más profunda, fue la posibilidad de convivir con Paloma Calle en su cosmos.

Todavía sorprendida por las personas que sostuvieron la presentación en Arthaus ese sábado, me animo a compartir todo ese vértigo vivido, yo solo quería escribir una carta para quienes hicieron posible el encuentro. Fue mucho más natural naufragar en la escritura automática que sentarme a teorizar sobre 100 cosas insignificantes que transformaron mi cuerpo. Para mí, fue importante quejarme, después de hacer 99 cosas el 25 de marzo de 2023, yo solo quise quejarme del abuso de poder.

Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance '100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo' (FOTO Gabriel Estrada Reyes)
Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance ‘100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo’ (FOTO Gabriel Estrada Reyes)

100 cosas que decir sobre una experiencia dedicada al azar telepático:

  1. a veces el amor es un estado mental. Los amantes no hacen al amor. Así como la familia no lo hace. El amor no se hace,
  2. ciertos incidentes tuvieron lugar aquí. Entre humo y papel, sol y lágrimas, incidentes inimaginables tuvieron lugar aquí, quiero decir. Decir aquí y decirlo todo. Aprendí que el descontrol es un estado de emergencia controlado, no así el amor. Se ve profundamente que hay un orden lógico en todo y que no existen los accidentes. Se ve perfectamente que estamos solas repitiendo acciones, creyendo en el simulacro, aunque siempre hay algo más…
  3. el deseo, por ejemplo.
  4. también los ecos de ese otro semejante, una otra, uno ser lo otro en la otra, otres en fiestas incompletas o vacías, a veces, ocurren estas fallas para decirnos que es hora de descansar. Descanso como si el “ahora” fuera una pauta. Me refiero al sueño y al desamor, a la idea preconcebida de expectación, maternidad, despilfarro.
  5. hay que comprar pizza para todos los espectadores. Nadie puede quedarse sin probar esa pizza que ordenamos.
  6. hay que confiar, a veces, en Mar Azul, porque el sol sale a las 18 horas, aunque te desanimes por la arena y el viento y el cielo nublado.
  7. hay que tener un contacto.
  8. evitar los bicitaxis y las partidas los martes.
  9. evitar la Coca Cola, excepto la TuKola, todo líquido que contenga azúcar y calorías debe ser evitado.
  10. a veces el amor cabe en un esmalte de uñas o en las manos salivadas para una masturbación colectiva.
  11. ¿para qué hacemos todo esto?, se pregunta una alemana que vive en San Lázaro.
  12. ella se tuvo que marchar a las 3 horas de la performance. Me ha confesado un miércoles que no se quería marchar.
  13. el tiempo, por ejemplo.
  14. tampoco quiere el tiempo irse ni ofrecer declaraciones sobre la duración.
  15. ¿cuánto dura un merengue en la sala de una casa 1216?
  16. a veces, la muerte, por ejemplo, es un tenedor y un pozuelo.
  17. cuando José me llamó me sentí sorprendida. ¿Por qué tendría que ser yo? ¿Por qué existen los visados? Más bien, reformulo, ¿visado cultural? cuando José me llamó recordé que ciertas decisiones persiguen un propósito,
  18. el amor, por ejemplo.
  19. vagas proposiciones en la esquina. De espaldas. Los banquitos. La pared. La columna. La familia. La única cosa sagrada es escupir con la lengua seca, sequísima.
  20. esforzarse, solo si es para correr hasta la parada del P6,
  21. para tirar la basura. ¿Cómo no la íbamos a tirar?
  22. tirarlo todo, ¿sabes?, tirarnos del pelo y bailar. Gestos robóticos son necesarios. Aquí solo se ama en la realidad virtual.
  23. preguntárselo todo a esa inteligencia superior. Exactamente, por aquello de que las artes vivas se burlan de la mueca feroz de un bot. A ver, querido bot, ¿qué cosa es ser cosa mejor?
  24. un espectáculo, cierto, un espectáculo sobre la contemplación, siempre es mejor.
  25. conmiseración, acelera, apenas queda tiempo para un cadáver.
  26. 3169 en Neptuno. Perfecto. Las pizzas frías.
  27. en una ventana en la calle C comprender el efecto que tienen las galletas saborizadas, cierto polvillo de chorizo cayó sobre la masa. Cierta complicidad preguntona cayó sobre la materia. No vinimos a fumar. No vinimos a fiestar. ¿A qué vinimos?
  28. ella friega los vasos.
  29. si nadie contesta es por alguna razón, el amor no es taquigráfico.
  30. el performance, tal vez.
  31. y si tienes pechos rebosantes, dale a tus hijos, leche que chupar.
  32. chúpala, mientras dure, al menos quedan olas, queda mar, queda serenidad.
  33. pero de los bicitaxis rehúye, una muela y un viento de cuaresma y una caída pueden hacerte reflexionar sobre cien pájaros de espuma.
  34. en mano, el amor, la salvajá, la animalá, la soledá.
  35. el ballet, por ejemplo.
  36. paloma calle dice ser una mano, dice ser una madre, dice, bollera, dice, tortilla, a veces, dice, un bistec de pollo, y no bebe ni se droga, algo ha empezado bien aquí, por las 17 horas en las que nos encontrábamos listas, pon tu cabeza aquí, pon el pepino aquí, lo importante es la belleza, menos bella era, la sensación de no pertenecer al presente, la confirmación de que no existe ningún presente.
  37. esta obra ocurre aquí.
  38. ¿aquí?, ¿es un ejemplo?
  39. la palabra karaoke es un estado mental.
  40. presupone una categoría comunal, tal como quejarse o amarse. Todo se ha extraviado, ni hablar del caviar, todo, hasta las ilustraciones de unos pies o una cara. Lleva anteojos. Lleva espejuelos. Lleva gafas. Imito al hombre que veo en todos los eventos de Arthaus, su mirada pícara carga demasiada felicidad.
  41. ¿todo se trató de un atlas?
  42. señalar el confín, lo inexacto, la proximidad de lo común, cada hipnosis implica, meterse en la cabeza del osito de peluche, cada luz dorada implica, meterse en una ouija líquida de tinta. Vámonos a Tailandia, dice, vámonos, torera.
  43. derrama tu vaso en mí, señor.
  44. derramá voy sobre ti, señor. Derramá sobre la improvisación, zapatillas, muequillas, todo salió perfecto menos el amor.
  45. experiencias teatrales así, dirán, sirven para la sugestión, el quizá.
  46. apenas pude comprender el grito al alabar, un aplomo sentimental se deja oír, en la sala de la casa hay un fantasma consumista.
  47. brindis por el fantasma. Ni la esperanza ni lo búdico me parecen milagrosos. Estar aquí, irse a dormir, disfrutar de una tela peluche, ahí si hay consagración…
  48. y porvenir.
  49. sincronizar la perdedera, trastabillea, choca, truena.
  50. sincronizar la escucha.
  51. menos mal que tengo articulaciones y músculos.
  52. es un milagro, pero estamos vivas, paloma, paloma en mano, paloma,
  53. en mano, unas protuberancias, ¡son pesas!
  54. me pesa el país, me pesa creer, pero vienen esta gente, y recuerdas que Mercy vive en San Nicolás y Concordia por una razón, para ver este amor crecer.
  55. es decir, trasplantarlo, verlo danzar de aquí para allá en La Caridad, como quien no lo puede creer.
  56. el creer, por ejemplo.
  57. en un dispositivo, un estado, un goteo, un hacer, cree, niña, por tu madre, cree.
  58. me quito los años para el mármol padecer. En el arte se padece, coyunturalmente, mírame, de coyuntura en coyuntura, arte para padecer deliciosamente, tiempo…
  59. horas…
  60. para qué…
  61. yo te dije que no estaba lista, empecé a esbozar un no sé qué, tal telenovela, tal bebé, empecé a orientarme en no sé qué, tal episodio, tal estruendo, empecé a equivocarme en no sé qué.
  62. mi familia es muy importante para mí.
  63. cuidar a mi madre.
  64. selena, una mañana, flores, girasoles, un batido, para qué.
  65. como botella, vaso plástico, vela, como micrófono inalámbrico, así me sentí en la performance.
  66. no ejecutar una cosa, ser la cosa, su devenir. Ser el aparente estadío de quedarse quietas, en un cumplir con no sé qué.
  67. ¿me juras que no estás jugando?
  68. ¿juzgar?
  69. atenuar el llanto del bebé con la aguja y el hilo. Ensartar el miedo de vez en vez como el botón que guardo en una caja.
  70. como en aquel sueño incendiado.
  71. aftersun, tal vez.
  72. Joanna no responde, está en los Everglades. Ciertas marañas existen, escena y constancia en un arbitrario encuentro. Dos minutos, por favor, tiene usted dos minutos, para mar y tierra, tierra y mar, disemínese en aquel bulto de agua, dos minutos, era un sueño, o un tal vez, ¿juzgamos lo que somos capaces de sentir en dos minutos?
  73. la plaga, por ejemplo, el colapso, un entremés.
  74. guirnaldas y serpentinas rotas, contar losas, yo no sé.
  75. a veces, paloma, viene el delirio a hacerse cargo, porque tiene que existir un responsable, porque tanto desamor tiene que valer. Basta que sea marzo. Basta que anochezca más tarde. Basta que el estómago se cierre. Venga el trueno. Venga el rayo. Venga la única experiencia sin saber, un agujero negro es…
  76. mi boca.
  77. mi cama.
  78. mi casa.
  79. yo no tengo casa ni iMac, una camita tengo.
  80. ¿crees que esto te pueda doler?
  81. al bicitaxi.
  82. la caída.
  83. una escafandra, mis ojos diciendo Andy, su nombre, tú sabes, hijos tienes, tú puedes escuchar lo que dicen las biblias y los poetas y los emblemas, azúcar y sangre, tenemos esta dicha de estar y temer, de extrañar su recuerdo y ser Cuba en su muerte inexplicable.
  84. ¿comprometerse?
  85. ¿abstenerse?
  86. el deseo, por ejemplo.
  87. aprendí que una caligrafía dice mucho, paloma, dice, calle, avenida, San Lázaro, mejores cosas, balbucea, mejores cosas…
  88. qué hacer.
  89. yo nací con este incidente en el GPS, malecón, niebla, ver el tímpano caer.
  90. era necesario este estruendo, sostener el no saber, basta que sea un día cálido, para entrenarnos, dice el conjunto, somos people, eh!, somos public, eh!
  91. a veces el amor es un estado inquietante, se desploma o se engancha al sueño, a un mojito o una mesa buffet, mirándonos otra vez, la playa.
  92. tú has visto que aquí todo es inexacto.
  93. accidentarse, lo es.
  94. por eso este manifiesto, este atropello instantáneo.
  95. líquida era la causa,
  96. líquida, la saliva,
  97. el amor,
  98. la performance, el fin,
  99.           después.
Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance '100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo' (FOTO Gabriel Estrada Reyes)
Martha Luisa Hernández Cadenas y Paloma Calle en el performance ‘100 cosas que hacer mejor que ver este espectáculo’ (FOTO Gabriel Estrada Reyes)
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MARTHA LUISA HERNÁNDEZ CADENAS
Martha Luisa Hernández Cadenas, Martica Minipunto (Guantánamo, Cuba, 1991). Teatróloga, poeta y performer. Coordinadora del Laboratorio Escénico de Experimentación Social (LEES). Entre su obra reciente se encuentran los performances Nueve (2017) y Extintos, aquí no vuelan mariposas (2018); las intervenciones La última ópera china (2018) y Las fundadoras (2019). Fundadora de la editorial independiente ediciones sinsentido. Ha publicado el poemario Días de hormigas (Premio David de Poesía 2017, Ediciones Unión, 2018). Ganadora del Premio de ensayo La Selva Oscura por su investigación Notas de un simulador. La crítica teatral de Calvert Casey (1960-1965) y del Premio de Teatrología Rine Leal por su libro ESTA OBRA HABLA DE TI Y DE MI. Ensayos para (des)a(r)mar la experimentación escénica en Cuba (2012-2018).

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