F. Mond, cuyo nombre real era Félix Mondéjar, falleció este martes a los 82 años en La Habana, según informó la Editorial Gente Nueva, sello bajo el cual publicó parte de su literatura consagrada al humor y la ciencia ficción. Apreciado entre los lectores juveniles y los amantes de la ficción especulativa en Cuba, legó obras como Con perdón de los terrícolas (1979), Cecilia después o ¿Por qué la tierra? (1983) o Krónicas Koradianas (1988).
“Hoy 22 de agosto del 2023, a las seis de la mañana, el escritor F. Mond fue reclamado por los koradianos a viajar al infinito. Nadie vio la nave espacial. Irse no le debió ser fácil, fueron ochenta y dos años terrícolas después de todo”, indicó en Facebook la casa editora, sin explicitar las causas del deceso. “Solo dejó atrás a su alter ego Monsieur Larx, el robot de apariencia humana, porte francés y expresión de «cero» en su rostro como de alguien que siempre está comunicándose con alguna computadora”.
La obra de F. Mond alcanzó su punto de mayor popularidad durante los años ochenta del pasado siglo, década en que llegaron también a manos de los lectores cubanos títulos como Para verte reír (1979) o ¿Dónde está mi Habana? (1980), publicados por la Editorial Letras Cubanas.
Hacia el fin del milenio aparecieron, bajo ese mismo sello, otros dos libros suyos: Vida, pasión y suerte (1999) y Holocausto (2084) (2000).
“Su obra, si bien poco divulgada a modo general en Cuba, cuenta con un amplio grupo de admiradores, incluso fuera de fronteras”, aseguró en su despedida Gente Nueva. “Muy disfrutada y querida por lo ocurrente, inteligente y uso del humor frecuente, al punto de romper la cuarta pared de sus textos y volver a entrar sin que el lector perdiera el hilo de la historia ni la dentadura de tanto reírse”.
Discípulo de Oscar Hurtado, clásico de la ciencia ficción en la isla, F. Mond cultivó la ciencia ficción con una impronta personal insicutible. Digamos que no solo se dio a crear en una serie novelesca –que comenzó con Con perdón de los terrícolas— el planeta Korad, cuyas crónicas remiten paródicamente, por supuesto, a aquellas “marcianas” de Ray Bradbury–, sino que se propuso hacerlo con gracia.
“Yo escribo. Si no me da risa, lo vuelvo a reescribir y así hasta que lo haga”, confesó alguna vez el autor, de acuerdo con la publicación de Gente Nueva.
Y decía en una muy reciente entrevista concedida a la revista Caimán Barbudo: “Yo no sé por qué aquí la gente, la intelectualidad, le tiene tirria, diría yo, a las cosas humorísticas. Uno escribe cosas humorísticas y las escribe en serio, y ellos: ¡no!, hay que escribir cosas serias sobre temas serios. No se debe jugar con tal cosa, con tal tema, porque eso es muy serio […]. Y a mí esa seriedad no me gusta, sencillamente. Siempre me fui buscando la onda de la risa, porque, ¿qué mejor podemos hacer que reírnos?”.
Tras casi dos decenios de silencio editorial, llegaría en el año 2017 la novela Hasta que la muerte nos una, primera de una serie de ciencia ficción histórica cuya segunda entrega es Recuérdame (2019), a las que seguirán otras dos en Gente Nueva.
Félix Mondéjar –nacido en 1941 en Los Arabos, Matanzas– colaboró en su momento en el tabloide humorístico Zig-zag, y años más tarde en publicaciones como publicaciones Dedeté, Opina y Palante.
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