El sociólogo y politólogo cubano Juan Valdés Paz falleció este martes en La Habana, a los 83 años, debido a complicaciones asociadas al coronavirus, informaron medios oficiales de la isla. La noticia fue lamentada en redes sociales por exalumnos y colaboradores cercanos.
Valdés Paz desarrolló su carrera, sobre todo, al interior de instituciones docentes e investigativas cubanas, y desde su compromiso con ideas socialistas defendía que “la Revolución arrastra conquistas populares” que deben ser preservadas.
Sin embargo, colegas dentro y fuera del país lo apreciaron en tanto académico con una obra crítica que articula un marxismo alejado de la ortodoxia.
De hecho, perteneció en su juventud al grupo de investigadores nucleados alrededor de la revista Pensamiento Crítico (1967-1971) –dirigida por Fernando Martínez Heredia[1]–, cuya producción se desmarcaba de los manuales soviéticos y se abría al diálogo teórico con otras tendencias de la izquierda internacional; una aventura “revolucionaria” que a la postre fue clausurada por la burocracia insular.
Este martes, el historiador Rafael Rojas deploró en Twitter la muerte de “uno de los últimos intelectuales que quedaban de la brillante generación de Pensamiento Crítico”, y reposteó una reseña suya del último libro de Valdés Paz, el cual, según hizo notar, también cita en la introducción de su reciente volumen El árbol de las revoluciones. El poder y las ideas en América Latina.
Rojas no sólo subraya la pertenencia de Valdés Paz a “una brillante generación de marxistas cubanos, que emergió en el centro o la periferia del Departamento de Filosofía de la Universidad de La Habana y la revista Pensamiento Crítico en los años 60”, sino que lo cataloga como una de las “inteligencias que eluden ese torbellino pasional [que a menudo genera el caso isleño] y logran estudiar a Cuba desde la metodología y el lenguaje de las ciencias sociales latinoamericanas”.
En particular, pondera sus estudios sobre la “transición socialista” y el “sistema político”, así como “la perspectiva de las instituciones y los actores” en sus análisis, que muchas veces supieron distanciarse de los habituales excursos de “legitimación ideológica y culto al líder” dentro del campo intelectual doméstico.
“A diferencia de tanto relato histórico, a favor o en contra, que ve la historia contemporánea de Cuba en bloque, bajo conceptos difusos como «Revolución» o «Castrismo», Valdés Paz la subdivide en cinco periodos: 1959-63, 1964-74, 1975-91, 1992-2008 y 2009-18”, escribe Rojas. “Esta periodización responde, fundamentalmente, a las mutaciones del marco jurídico e institucional, pero también a las relaciones de poder entre el Estado y la sociedad”.
Por su parte, el jurista Julio César Guanche lo despidió en Facebook: “Se ha ido una parte de mí, pero, mucho más importante, un capítulo entero de lo que creo que es Cuba. Hasta que nos veamos, Juan. Seguiré escuchando cada segundo tu voz de trueno. Que esta tierra te sea leve, como merecen los buenos, los justos”. De igual manera, el economista Mauricio de Miranda, radicado en Colombia, señaló que Valdés Paz “deja como legado una prolífica obra”. “Hombre sabio y humilde”, dijo, “como son los verdaderamente grandes, combinaba la profundidad de su pensamiento con su sentido del humor”.
Los obituarios en la prensa estatal se refieren al “destacado intelectual” como alguien que “conjugó investigación y pensamiento en su producción” (Granma), y asimismo como “uno de los pensadores más destacados de la Cuba contemporánea” (Cubadebate). Resaltan, por supuesto, que le fuera entregado en 2014 el Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas.
Sin embargo, obvian puntualmente –tal como subraya este martes Diario de Cuba— que en 1996, mientras Valdés Paz laboraba (1980-1996) en el Centro de Estudios de América (CEA), esa entidad fue sometida a una suerte de purga. Naturalmente, sus integrantes fueron reubicados en otros puestos de trabajo. De hecho, el CEA llegó a ser calificado por Raúl Castro como una “quinta columna del imperialismo al servicio de la CIA”, según recuerda Haroldo Dilla en un artículo publicado en Cubaencuentro.
En esta jornada, el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) también dijo adiós a Valdés Paz. Lo hicieron igualmente la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y, dentro de Cuba, el Centro Memorial “Martin Luther King” y el Centro de Investigación Cultural “Juan Marinello”.
Juan Valdés Paz (1938-2021) fue profesor titular adjunto de la Universidad de La Habana –y, en especial, de su Departamento de Filosofía entre 1969 y 1971– y del Instituto Superior de Relaciones Internacionales Raúl Roa García. Tras su salida del CEA, fue investigador del Instituto de Historia de Cuba (1996-1999).
Es autor de libros como La transición socialista en Cuba (1993), Procesos agrarios en Cuba, 1959-1995 (1997), El proceso de organización agraria en Cuba. 1959-2007 y El espacio y el límite. Ensayos sobre el sistema político cubano (2009). Numerosos artículos suyos aparecieron en revistas y volúmenes colectivos de México, Costa Rica, Puerto Rico, Argentina, Brasil, Perú, España, Estados Unidos, entre otros.
[1] “Es cierto que no ganamos, que terminamos mal, pero no fuimos derrotados”, reconoció en su momento Martínez Heredia.
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