La novela debut de Joseph Andras y los ensayos de Juan Villoro resaltaron entre lo nuevo de abril en Anagrama

La novela De nuestros hermanos heridos, del escritor francés Joseph Andras (1984), merecedora del Prix Goncourt du Premier Roman, y un «Compendium» que incluye los ensayos y crónicas correspondientes dos obras –Efectos personales y De eso se trata– del mexicano Juan Villoro (1956) destacaron entre las nuevas ofertas de la editorial Anagrama en este mes de abril.

Andras –quien rechazó en su día el lauro que concede desde 1990 la prestigiosa Academia Goncourt en protesta contra “la institucionalización de la escritura y la idea de competición literaria”– relata en su debut novelístico “la historia verídica de Fernand Iveton, el único pied noir ejecutado por el gobierno francés durante la guerra de Argelia”, según lo resume la casa editora española.

“La bomba, estratégicamente dispuesta en un lugar donde no pueda provocar heridos ni víctimas, es desactivada antes de que estalle, y el activista acaba detenido. Es interrogado, torturado y condenado a muerte. Sus abogados piden clemencia a las más altas instancias, entre otros al ministro de Justicia de entonces, que es el futuro presidente François Mitterrand. Pero el perdón no llega…”; así se presenta la trama a los lectores en español, no familiarizados en general con el caso histórico: “El libro reconstruye con los instrumentos de la narración novelística la historia real del protagonista: el atentado fallido, la detención, el proceso, pero también la infancia de Iveton, la relación con su amada Hélène, sus ideales de justicia social… La literatura repara una injusticia”.

Además de De nuestros hermanos heridos (con traducción de Álex Gibert), la colección «Panorama de narrativas» de Anagrama también acogió hace un par de años el volumen A lo lejos el cielo del sur & Así les hacemos la guerra, que reúnes dos textos breves de Joseph Andras.

El compendio ensayístico de Villoro provee una extensa oportunidad –más de 500 páginas– para asistir a la alquimia de un autor que convierte “sus lecturas en relatos de la inteligencia”.

“Ambas obras muestran a un narrador sumido en la aventura de leer; las anécdotas se suceden como en una novela y los comentarios surgen con el ingenio de una feliz tertulia”, aseguran los editores. En las páginas de Efectos personales y De eso se trata asoma “una excepcional galería de personajes: Goethe atrapado en la geometría del amor; Cervantes, fundador de la road novel; Rousseau, que une su destino a la arriesgada noción de autor; Lowry en el intoxicado paraíso de Cuernavaca”.

“También encontramos un testimonio de afinidades electivas”, hace notar la editorial con sede en Barcelona: “una reconstrucción de la convulsa estancia de Burroughs en México; la indagación del exilio póstumo de Bernhard; el jardín ilustrado de Monterroso; la vertiente más heterodoxa de Fuentes; el viaje sin aduanas de Pitol; la inteligencia distraída de Rossi. Junto a estos –y otros– tributos y retratos, hay espacio para el Villoro cronista y para el que explora los ritos de pasaje de la traducción literaria y el diálogo entre las literaturas de América y Europa”.

Situado en un orden en sí mismo, quizá el libro más inspirado, y esplendente, entre las recientes publicaciones de Anagrama sea el poema épico Omeros, del gran Derek Walcott, Premio Nobel de Literatura (1992). Sobre esta edición bilingüe –en versión del mexicano José Luis Rivas– ya dimos noticia hace pocos días.

Otras novedades de abril en lengua española fueron Por así decirlo, de J. Á. González Sainz, aparecida en la colección «Narrativas hispánicas» y la reflexión acerca del pasado y sus vestigios a que invita Daniel Rico en su volumen titulado en ¿Quién teme a Francisco Franco?, incluido en «Nuevos cuadernos Anagrama».