Exilio y memoria en clave paródica. Eliecer Jiménez Almeida estrena ‘Havana Stories. La operación Payret’ en el Festival de Cine de Miami

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‘Havana Stories. La operación Payret’ (2023), de Eliecer Jiménez Almeida, se estrena en el Festival Internacional de Cine de Miami. (IMAGEN www.imdb.com)
‘Havana Stories. La operación Payret’ (2023), de Eliecer Jiménez Almeida, se estrena en el Festival Internacional de Cine de Miami. (IMAGEN www.imdb.com)

El singular realizador cubano Eliecer Jiménez Almeida ha urdido un interesante simulacro fílmico en su más reciente producción. Havana Stories. La operación Payret (2023) es una intencionada manipulación del principio de objetividad atribuido al documental, y una gran mentira argumental que, paradójicamente, aprehende un perfil significativo de la realidad del cubano. Mucho más próxima a la fábula que al mockumentary, la película despliega un provocador ejercicio de representación que evoca el registro documental para narrar, sin ingenuidad alguna, una historia, o varias, absolutamente fictivas.

Havana Stories. La operación Payret tendrá su estreno oficial en el Festival Internacional de Cine de Miami, cuya 40o edición se celebrará entre los días 3 y 12 de marzo de 2023. El evento resulta un espacio privilegiado para presentar el nuevo filme de Jiménez Almeida, en tanto una de las estrategias de seducción orquestadas por el director ha sido teñir el plano ficcional con guiños a “la vida real” de los propios intérpretes –Carlos Acosta Milián, Susana Pérez, Gerardo Riverón, Judith González, Albertico Pujol, Laura Alemán Satorre y Landy Alvero–, o bien a figuras tipo, inmediatamente detectables por el potencial espectador cubano. Sin dudas, este aspecto dimensiona/enriquece el picaresco simulacro fílmico fraguado camagüeyano.

Entre todos los asistentes al festival, los cubanos del exilio podrán disfrutar especialmente este “documental en clave de comedia de enredos”, o “policiaco humorístico que juega al documental”, pues se consagra en alguna medida a retratar el singular imaginario de esa comunidad, tensado entre la picardía y el choteo intrínsecos a la conducta del cubano y la opresiva memoria de la cotidianidad revolucionaria.

Y justo algo que hace sugestivo a …La operación Payret es la construcción de esa voz del exilio cubano en los Estados Unidos. Una construcción que, si bien no pretende ser definitiva, consigue ser elocuente al exponer una subjetividad que escapó de la isla “en busca de libertad” y, una vez fuera, se descubre con la isla a cuestas, con todo el peso de una historia política y económica a sus espaldas. A la vez, el filme es un catálogo de tipos que presuntamente distinguen a una comunidad nacional. La cinta parodia varios índices de la identidad del cubano, en la isla y en el exilio, en un ingenioso juego de alusiones cuya materia prima son los valores culturales de lo estereotípico.

Póster de ‘Havana Stories. La operación Payret’ (2023); Eliecer Jiménez Almeida (IMAGEN www.imdb.com)
Póster de ‘Havana Stories. La operación Payret’ (2023); Eliecer Jiménez Almeida (IMAGEN www.imdb.com)

En la colectividad que componen los personajes de …La operación Payret se palpa el credo y la suerte de un sinnúmero de individuos que se muestran llanos por fuera, pero llevan interiormente una herencia de dolor, sacrificio, subordinación, renunciamiento… El humor que atraviesa la trama fílmica –emanado del diseño mismo de esas individualidades, y del contexto a que pertenecen– vendría a ser una pátina, en el exilio, que se extiende sobre el desasosiego existencial –y económico, político– vivido en la isla.

Jiménez Almeida estructura la narración a partir de la alternancia de personajes que, frente a cámara, son interrogados a propósito de su involucramiento en “la operación Payret”; otros son entrevistados por su relación directa o indirecta con los primeros. Todo el arco dramático está erigido a fin de esclarecer ese suceso, ocurrido en Cuba hacia finales de los años setenta, y que incide todavía hoy en el destino de los implicados. Aun cuando el grueso del relato es referido por estos personajes, el mismo progresa, sobre una gramática policial, gracias al crecimiento del conflicto y al sagaz uso de la intriga.

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Ofrecen sus declaraciones a la detectivesca cámara –o periodística, que perfectamente podría haber salido de un show de Univisión– siete individuos relacionados entre sí, o cuyas vidas se entrecruzan en algún momento: 1) Santiago Segura, el agente de la Seguridad responsable de tramar la operación Payret; 2) Daniel Faz, la víctima del operativo, quien en sus días de estudiante de Historia del Arte en La Habana fue acusado y condenado debido a su presunta homosexualidad; 3) Roxana Pérez, quien salió de Cuba durante el éxodo del Mariel, hermana de la actriz Susana Pérez; 4) María Félix, hija de Roxana y exesposa de Faz, que por múltiples motivos regresa y se establece en la isla durante el Período Especial; 5) Carlos Lazio, un religioso vinculado de diversas formas con Cuba; 6) Claudia Vigoa, una prostituta que logra salir del país gracias a una relación con Lazio, y el único personaje que ofrece su testimonio desde La Habana, y 7) Yunior Mendoza, proxeneta y pretendiente de Vigoa que deja Cuba y contrae matrimonio con Faz.

Pero cuando …La operación Payret resulta más virtuosa no es en la concepción del aludido operativo, o en su desbrozamiento argumental, sino cuando escruta las experiencias existenciales, los sueños y los deseos, las ambiciones y las frustraciones, el odio y la inocencia, la superfluidad y el oportunismo que han transido a estos seres, marxistamente condicionados –insinúa, quizás involuntariamente, el director– por un flujo histórico y un medio social. El agente de la Seguridad, la prostituta, el “hijo e` puta”… estas personas se nos presentan como facetas de un sistema del que no se escapa nunca.

Resulta claro que el encanto de …La operación Payret se acoda en el estimulante ejercicio cinematográfico emprendido por Jiménez Almeida. Echando mano a una fotografía y una puesta en escena funcionales, el director encuentra fortalezas en el montaje de códigos genéricos (ya referido) y en las interpretaciones. En el plano estructural, la película anuda el documental con la ficción, el policiaco con la comedia, el drama histórico con talk show… Ese aceitado ensamble –que atañe lo mismo al diseño de los personajes y a los criterios visuales– favorece la exposición de las fisuras humanas (del clima ético) que define a los entrevistados como al paisaje histórico que refieren. En tanto, las actuaciones son verdaderamente relevantes: primero, dada la organicidad y la intencionalidad de los parlamentos en boca de unos intérpretes que apenas se mueven de sus asientos, y, segundo, gracias a la equilibrada clave histriónica implementada, que se mueve entre la farsa y el realismo.

Jiménez Almeida entregará al público del Festival Internacional de Miami una arrojada experiencia creativa. Diría ahora que este simulacro de ficción, en tanto tal, consigue documentar, como mínimo, un estado del ser cubano. …La operación Payret es una parodia; una parodia que, al mismo tiempo, ama y chotea al cubano que emigra… y al propio medio audiovisual. Si pasamos del plano argumental de la película, se asistirá a una reflexión sobre el peso de la memoria y sobre la continuidad de los mecanismos de control desplegados por el poder.

¿Puede ser entonces ese exilio una fuerza cívica que incida decisivamente en la suerte de la isla?

1 comentario

  1. Por si no bastará el bla bla bla, el colofón es una pregunta magistralmente retórica. Hijo mío, media Cuba está fuera de Cuba y la que queda en la Isla está loca por irse. En cuanto a la peli, solo le deseo que esté más entretenida que esta ¿crítica?

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